domingo, 17 de enero de 2010

Rentabilidad del IBEX frente a la inmobiliaria

Un estudio de la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS) pone sobre la mesa un aspecto importante del boom inmobiliario y que ha pasado desapercibido: la rentabilidad del mercado bursátil ha más que duplicado la rentabilidad de la inversión inmobiliaria. Cabe objetar a esto que en las segundas, el apalancamiento financiero, la posibilidad de fraude fiscal, las deducciones en el IRPF, la facilidad de las operaciones y la intensa demanda, aumentaban aún más los rendimientos finales. Comprar sobre plano y vender cuando la obra estaba terminada con una inversión del 20% del total suponía una gran rentabilidad. Aun comprando al contado para luego vender, la rentabilidad era bastante aceptable.
Este argumento utilizado por aquellos que creían fielmente en la generosidad de la inversión inmobiliaria a largo plazo se ve refutado. Si la misma cantidad invertida en un fondo que replique el IBEX se hubiese dejado madurar entre 1994 y 2007, la rentabilidad sería del 579%, mientras que la inversión inmobiliaria habría dado un nada despreciable 246%. La misma operativa realizable en un tipo de inversión es realizable en el otro, con una diferencia esencial: la liquidez. La inversión financiera goza de una facilidad mucho mayor para deshacer posiciones sin grandes pérdidas, mientras que el mercado inmobiliario tiene rigideces que complican la desinversión y más en períodos de exceso de oferta como el actual.
Como siempre, la diversificación es esencial para proteger el patrimonio invertido, y los activos no correlacionados aportan estabilidad. La inversión inmobiliaria ha tenido un crecimiento enorme y ha provocado una burbuja en los precios que tardaremos en digerir, por las rigideces antes comentadas, y la vuelta a la rentabilidad será paulatina y a niveles más racionales. Muchos inversores habrán aprendido la lección y no volverán a entrar en un mercado recalentado, sobre todo al final de ciclo; "dejar que el último euro lo gane otro" es uno de las claves que utilizan los inversores profesionales en las finanzas, y esto hay que aplicarlo al mundo inmobiliario.